miércoles, 28 de julio de 2010

LA TOMA DE REFUGIO


A continuación una breve explicación sobre la Naturaleza de las Tres Joyas, Buda, Dharma y Sangha, y el sentido que tiene la Toma de Refugio en el Budismo.

Ustedes ya saben que el primer paso para practicar el Budismo y para convertirse en un Buda es Tomar Refugio. La razón de esto, es que el Refugio constituye la base de lo que nos permite aliviar el sufrimiento de esta vida y también nos permite evitar los reinos inferiores en el futuro, siendo de esta manera el Refugio, el mejor compañero que uno puede tener.

Si uno nace como tibetano, estará rodeado por el Dharma y le será natural Tomar Refugio, por lo que no hará falta explicar la práctica. Sin embargo los occidentales requieren explicaciones detalladas de la lógica del Refugio, de cuáles son las razones y el propósito de Tomar Refugio.

La primera razón, es que necesitamos tener un soporte objetivo para nuestra confianza respecto de nuestro camino y de nuestra práctica. Ese soporte son las 3 Joyas: Buda, Dharma y Sangha. En ese sentido, de estas 3 Joyas la principal es el Buda.

Si estudian la vida de Buda o de Padmasambhava, por ejemplo, reconocerán sus admirables cualidades y todos los logros que ellos consiguieron. De esta manera, surgirá así en ustedes la inspiración y la motivación a tener estos mismos logros. Este tipo de inspiración es algo vital para los seres humanos, pues ayuda a guiar sus vidas. Sin embargo, lo más importante a entender y analizar es que Buda, Padmasambhava y los 84 Mahasiddhas de la India, son diferentes de nosotros. ¿Pero en que sentido lo son, qué los hace diferentes?

La diferencia real entre ellos y nosotros es que practicaron y realizaron el resultado, realizaron el fruto de su práctica y se volvieron Budas; cada uno de ellos se realizó y cada uno comprendió por si mismo. Sin embargo, nosotros no hemos tenido éxito en llevar la práctica a ese nivel, no nos hemos liberado de los 3 Venenos.

La pregunta que sigue es ¿Podemos hacerlo nosotros también?

Con esto se completa brevemente la discusión del Buda como Refugio y de cómo nos puede inspirar como objeto de Refugio, aunque todavía no hemos entendido cómo es que la Enseñanza es el Refugio.

Podemos definir a un Buda como alguien que no tiene ninguna falta y que posee todas las cualidades. La razón de estos logros está en el Dharma. Hay dos tipos de Dharma, el de las escrituras o la tradición y el de la realización personal. Gracias al primero podemos realizar el segundo.

Si practicamos de acuerdo a la tradición, se puede llegar a tener realización. Esta realización tiene que ver con abandonar nuestras fallas y manifestar todas las cualidades, siendo esto realmente el objetivo. Hay que comprender que este tipo de realización tiene que ver con nuestra propia mente, por lo tanto el aspecto principal de la discusión acerca del Dharma, es apuntar a la naturaleza de la mente.


A este respecto podemos decir, que aquello que debe ser aceptado y aquello que debe ser abandonado, los 3 venenos emocionales o las emociones negativas o las faltas que nublan la mente, tienen como característica que uno puede liberarse de ellas. No hay un factor intrínseco que nos impida hacerlo. Por un lado no hay obstáculos en liberarse de los aspectos negativos y por otro lado las cualidades de la iluminación están siempre en un estado potencial de manifestarse. Ambas opciones están ya presentes, por lo que tenemos la opción o el potencial de experimentar Samsara o Nirvana, entonces será la originación interdependiente la que determinará si experimentamos la no-iluminación o la iluminación.

La distinción entre qué debe ser practicado y qué debe ser abandonado, proviene de la tradición y una vez que uno se ha conectado con esta tradición y ha hecho uso de ella, podemos obtener el efecto de esta práctica, evidenciándose una relación de causa y efecto entre la tradición del Dharma textual y el Dharma de la realización.

El tercer objeto de Refugio es la Sangha. La Sangha es la comunidad y ésta es cualquier persona que practique o estudie el Dharma. En el sentido más alto, Sangha son aquellos que merecen ser honrados o merecen recibir ofrendas. Los seres con realización son un Campo de Mérito, es decir al relacionarnos con ellos acumulamos mérito. Ahora bien, Sangha no son solo monjes y monjas, sino cualquiera que tenga un nivel de práctica y de realización, siendo así uno de los objetos de veneración y uno de los objetos de Refugio; cualquier persona que tenga un nivel de práctica y de realización es un campo de mérito para nosotros.

De entre los tres objetos de Refugio el Dharma es lo más importante, puesto que es lo que causa al Buda y a la Sangha. Buda es quien ha realizado el Dharma y la Sangha es quien está realizando el Dharma. Por lo tanto, el Dharma es el aspecto central que causa los otros dos objetos del Refugio.

Debemos pensar bien para entender correctamente la palabra “Dharma”. El Dharma es un proceso que nos permite separar la mente de las emociones perturbadoras; cuando la mente está libre de emociones negativas podemos decir que eso es el Dharma, es el haber comprendido y haber realizado el Dharma. El Dharma es, en conclusión, el proceso de eliminar las emociones y estados mentales negativos.

Es por eso que hablamos de Tomar Refugio o del poder protector del Dharma y de las Tres Joyas en su conjunto, pues nos protegen de los enemigos que son las emociones aflictivas y los estados cognitivos negativos. Es muy importante entender esto, de lo contrario nos quedamos entrampados en ideas como la de Budas cósmicos, etc. Perderemos de vista la significación verdadera tanto del Dharma de los textos como del Dharma de realización que es liberarse de las emociones negativas y sus consecuencias; el Dharma así no podrá protegernos ni nos servirá de Refugio, por lo que seguiremos igualmente desprotegidos y carentes de un Refugio verdadero. Si uno comprende este punto, surgirá la fe inamovible y se entenderá el sentido último del Refugio. Se entenderá que por medio del Dharma es posible liberar la mente de los kleshas y además manifestar totalmente las cualidades positivas. Esto es el punto central de cualquier análisis del Refugio.

Más aun en nuestra práctica de meditación o de contemplación, si unificamos esta con el análisis, alcanzaremos la experiencia de las notables cualidades de la mente, y ya no tendremos ninguna duda de la realidad última de la mente.

Por ello tener seguridad y comprensión del Refugio, nos permite tener verdadera confianza y practicar correctamente, de este modo es que el Refugio es la base de la realización. Si tenemos duda o no comprendemos cuáles son las bases del Refugio, nuestra práctica carecerá de un verdadero fundamento, de un sentido de dirección verdadero, y entonces será muy difícil tener alguna realización.

Traducido del Tibetano por John Petit, PhD. y del Ingles por Mauricio Salinas M.(Ngakpa Thondup) para beneficio de todos.

domingo, 25 de julio de 2010

Budismo y Vegetarianismo

Buddha

Para muchos, es obvio que un budista tiene que ser vegetariano. ¿Por qué? Porque el budismo promueve la consideración de "todos los seres sintientes" como más importantes que uno mismo. Esto con el fin de desarrollar el amor y la compasión, fuentes de felicidad tanto para uno como para los demás.

(Texto escrito por Éric Tanter para Ecosofia.org)

Para clarificar la relación entre budismo y vegetarianismo, debemos entender algunos conceptos claves del budismo.

Conceptos Clave

El budismo contempla 6 reinos en el samsara, que son los ciclos de nacimiento y renacimiento en los que viven todos los seres vivos (o también, los seres sintientes: humanos, animales, insectos, etc.) Cada reino del samsara está caracterizado por una emoción principal que mantiene a los seres conectados en él. En orden descendente esos reinos son:

  1. El Reino de los Dioses: emoción predominante es el Orgullo
  2. El Reino de los Semi-Dioses: emoción predominante es el Celo
  3. El Reino de los Humanos: emoción predominante es el Deseo
  4. El Reino de los Animales: emoción predominante es la Ignorancia
  5. El Reino de los Fantasmas Hambrientos: emoción predominante es la Avaricia
  6. El Reino del Infierno: emoción predominante es la Ira

Un ser se va encarnando (naciendo y renaciendo) en cada uno de estos reinos debido a hechos de su vida pasada, siguiendo la ley del karma.

Se dice que la vida humana es particularmente preciosa por la capacidad que tenemos como humanos de entrar en contacto con las enseñanzas, de entender como funciona el karma, cómo existen los fenómenos (la vacuidad), y por ende, liberarnos del samsara y posiblemente seguir hasta alcanzar la iluminación (budeidad), de modo de ayudar a los demás seres.

Dado que el budismo acepta la noción cosmológica del "sin principio", cada uno de nosotros ha tenido innumerables encarnaciones en todos estos reinos. Por lo tanto, es muy grande la probabilidad de que el perro callejero que ven cada mañana haya sido un ser cercano, incluso su propia madre. Sin hablar de la pobre vaca que terminó en sus platos.

¿Qué nos dice el budismo respecto a nuestras costumbres alimenticias?

Siento que los más extremos de ustedes se decepcionen, pero el budismo no plantea el vegetarianismo como "obligatorio" o prescriptivo (lo cual es una aberración de un punto de vista del jainismo por ejemplo, donde los practicantes son necesariamente veganos). Para tener una prueba de esto, basta ver un reportaje sobre la vida en el Tibet o tener la oportunidad de acercarse a un monasterio tibetano: allí las personas comen carne.

Pero si se sienten decepcionados, es que no entienden la sabiduría detras del "camino medio" enseñado por el Buddha. Por asi decirlo, no existe ninguna regla absoluta en el budismo. Lo que existe son un conjunto de prácticas y preceptos que no son comunes a todos los seres: todo depende del nivel mental que cada uno tenga o viva. Por ejemplo, un precepto es llegar a donar el propio cuerpo si esto es necesario para el bien de otros. Un ser con grandes realizaciones sí da su cuerpo, o (como una reintrepretación) deja otro tomar un trabajo al cual uno también postula, por compasión. Esas cosas no las podemos hacer en el estado mental en que vive la gran mayoría de las personas hoy en día.

Partiendo de esta base, el Buddha dejó diversas enseñanzas para muchas personas distintas. Algunas enseñanzas contradicen otras, porque en realidad están exponiendo una versión más sutil, o más avanzada, de otra enseñanza. Leyendo el libro "Food of the Bodhisattvas" que relata un trabajo del Yogi tibetano Shabkar, uno se entera de que el Buddha en algunas oportunidades habló de no comer nunca carne, en otras habló de no comer algunos tipos de carnes, y en otras se refirió a comer solamente carne que tenga ciertos atributos (por ejemplo: provenir de un animal que haya muerto en forma natural).

El punto fundamental de esto es que no se puede actuar de manera absolutista: si alguien no se siente capaz de no comer nada de carne, sigue siendo mejor que coma menos carne. O incluso que siga comiendo la misma cantidad de carne, pero con la conciencia de que está comiendo carne. De la misma manera, el budismo acepta al hombre que tiene que vivir de la pesca para mantener a su familia. Lo importante es que sea conciente de lo que esta haciendo, y que no goze con la muerte de los peces. Lo atractivo de esta "pedagogía", es que si un día este hombre pescador encuentra otro trabajo, ya habrá desarrollado la conciencia necesaria para dejar de matar animales para sobrevivir.

Todo esto tiene que ver con el hecho que en el karma, la intención de cada acción tiene muchisima importancia. Casi más que el hecho mismo. Piensen en el hecho de ser amable con el objetivo de engañar a alguien, o de matar un criminal que estaba a punto de matar a otras 10 personas. ¿Cuál es la acción?, ¿cuál es la intención?

Ahí radica la explicación de por qué en el Tibet, hasta los monjes y grandes Lamas comían y siguen comiendo carne. El Tibet es un país ubicado a más de 4.000 metros de altura, tiene inviernos largos y dificiles de aguantar, donde no sobreviven las plantas por mucho tiempo del año. Aparte de unas cuantas semillas, no se encuentra nada más. O sea, ser vegetariano en el Tibet es exponerse a la muerte de forma peligrosa. Shabkar fue uno de los pocos valientes que fueron vegetarianos absolutos en el Tibet. Pero era un Yogi, un hombre con un control muy avanzado sobre su cuerpo.

Ahora, despues de la invasión del Tibet por China, y con el establecimiento del gobierno en exilio de S.S. el Dalai Lama en Dharamsala, India, el comer carne está prohibido en las cocinas que dependen del Dalai Lama. Porque en la India sí que se puede vivir bien como vegetariano. Todo el año. Claramente, en nuestras sociedades occidentales, se puede vivir muy bien como vegetariano. Existen todos los productos necesarios para ello, todo el año, muchos restauranes que tienen menú vegetariano, etc. Ahora, algunos no se sienten listos para dejar del todo la carne. No hay ningún mal en eso. De nuevo, lo que importa es hacer las cosas a su nivel, y dejar el tiempo actuar. Darle importancia a la intención. Tomar conciencia de qué se esconde detrás de un pedazo de carne, de a poco va limitando las ganas de comer tanta carne. Comer un poco de carne de vez en cuando, de a poco va permitiendo a uno encontrar cosas ricas en la comida vegetariana. Hasta que uno deja de comprar carne para si mismo. Hasta que deje totalmente la carne. O no. Lo que importa es el camino, la intención. No el punto en que uno está en el camino.